lunes, 18 de mayo de 2009

al sur de chile...


¿Quien más sabe de mí que no seas tú?
Que no sean los bosques lluviosos que nos vieron crecer y las lluvias de otoño que nos empaparon de recuerdos de un ayer que no fue ayer; o talvez las nubes grises que acostumbraban hacernos compañía en las praderas escarpadas y lodosas del sur de chile.
¿Me recuerdas? ¿Lo recuerdas?, si aun no lo logras yo te cuento:

En el sur de chile los abrazos son más que abrazos, y los besos más que besos, son casi testamentos lluviosos de algo que trasciende el tiempo, de un sentimiento del cual las montañas húmedas y repletas de vegetación son testigos.
Te cuento haber si recuerdas:

en el sur de chile cada roca, cada árbol, cada ramita seca o verdosa siente y ríe contigo, las hojas de los pinos y araucarias acompañan de canciones mágicas cada paso, y los pájaros silvestres, libres y salvajes coronan cada sentimiento de amor con una risa que atraviesa el bosque y las montañas húmedas. En el sur de chile el bosque cobra vida como una canción de notas melancólicas y ágiles al compás del viento, que cuenta historias de hombres guerreros y fuertes, de besos de pasión y sonrisas de niños húmedos y pobres. Al sur de chile cada árbol habla y las montañas se gritan secretos arrastrados por el viento húmedo con aroma a leña; la gente sureña es cálida y almidonada, tiene mas que un alma a diferencia de las personas de otros lugares; el sureño tiene alma, fuego y trueno dentro de si, tiene un amor fiero y protector con sonrisa ancha y manos rusticas y fuertes, el sureño es hijo del bosque y su amor fruto de las montañas compañeras y los bosques lluviosos que lo arrullaron desde niño con sus canciones de hadas y magos, que se esconden recelosos de la humanidad que dejo de creer en la magia para vivir en la mal llamada realidad carente casi de sueños y de magia; magia que siempre esta presente aquí, en cada paso, en cada árbol en las canciones del bosque húmedo pero acogedor. El sur de chile es un lugar perfecto para enamorarse, aquí cada mirada y caricia adquiere un tono lluvioso y los abrazos son mas cálidos que en cualquier parte del mundo. En el sur cada persona se convierte en canción y cada amor en inolvidable, cada risa corre de la mano al viento, y cada palabra sonríe con el bosque, las miradas esconden atardeceres al lado del fuego y las pisadas las nostalgias del bosque. ¿Lo recuerdas?...

6 comentarios:

Julia Hernández dijo...

Recorrí todos los lugares maravillosos y mágicos que describes paso a paso, narrado con una frescura y pasión de cada pedacito de tu Chile querido y de sus lugareños, una belleza éste relato, claro, el amor y los recuerdos rondan por todos tus lugares lindísimos. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Sabes a qué me recordó este texto?
Al Aviso de Colum xD jajaaj... es que hablaban del sur; pero es bien mágica la situación.. la gente es ultra simpática y amable (lo contrario de los santiaginos), las frutas silvestres que me encantan, los infinitos y reconditos paisajes :) y te dan ganas de volver.

ahaa.. tenemos que juntarnos :) sisis
y qué lástima q te hayan hackeado tu msn :/ gente mala no más

cuidate harto, nos leemos como siempre :)

aaa dijo...

se palpa el amor, es como estar viendolo todo a través de una ventana empañada.
te sigo.

Mi Ovario Sentimental dijo...

Que maravilloso lo que escribiste...sentir la inspiración a partir de un lugar geográfico,me parece hermoso..


Saludos (:

Amorexia. dijo...

para que dejarle besos a quien no los recibira?

Gracias por pasar por mi hora mas oscura. Cuando necesites donde ir a lamerte las heridas ya sabés donde ir.

Deshora.

Gab dijo...

Seré sincero... solo leí el primer párrafo de tu publicación. Sin embargo, me dejé hipnotizar unos cuantos minutos por la música... :)